Tarta de cumpleaños de chocolate

Existen muchas formas distintas de preparar una tarta de chocolate para cumpleaños, pero ninguna tan rica y tan fácil como la que os vamos a mostrar aquí. Su bizcocho tiene una textura suave y esponjosa y está salpicado de chips, mientras que su cobertura de frosting le añade un contrapunto crujiente que es simplemente irresistible. ¿Cómo? ¿Qué no tienes ni idea de repostería? Pues no pasa nada, ya que esta receta está al alcance de cualquiera. ¡A la cocina!

Ingredientes

Para el bizcocho:

125 gramos de mantequilla.
150 gramos de azúcar.
100 gramos de harina de fuerza.
3 huevos medianos.
30 gramos de cocoa (chocolate en polvo).
6 gramos de levadura.
25 gramos de maicena.
75 gramos de chips de chocolate.
Una pizca de sal.

Para el frosting de chocolate:

250 gramos de azúcar glas.
125 gramos de mantequilla.
65 gramos de cocoa.
Una cucharada pequeña de esencia de vainilla.
Un par de cucharadas de leche.
Opcional: media cucharada pequeña de café y un pellizco de canela.

Cómo hacer Tarta de cumpleaños de chocolate

Comenzamos la preparación batiendo la mantequilla a temperatura ambiente hasta obtener una crema muy suave. A continuación, agregamos el azúcar y seguimos mezclando. Cuando ambos ingredientes se integren añadimos los huevos de uno en uno y sin dejar de remover.
Ponemos el horno a precalentar a 180 grados. Forramos un molde de unos 20 centímetros con papel de cocina o lo engrasamos con un poco de mantequilla.
Tamizamos todos los ingredientes secos con ayuda de un colador, evitando de esta forma que aparezcan grumos en la masa. Incorporamos a la mezcla anterior la harina, levadura, maicena, cocoa y la sal.
Batimos para conseguir una textura homogénea y justo antes de terminar echamos los chips o trocitos de chocolate. De esta forma se repartirán por todo el bizcocho y no se quedarán en el fondo.
Cuando la masa esté lista la echamos en el molde forrado o engrasado y la introducimos en el horno. Hay que cocinar durante 40 o 45 minutos a una temperatura de 180 grados. Cuando queden unos minutos para acabar pinchamos el bizcocho con un palillo de madera, si sale limpio está en su punto, de lo contrario habrá que hornear un poco más.
Sacamos el molde del horno y dejamos que se enfríe a temperatura ambiente. Mientras tanto vamos a ir preparando nuestro delicioso frosting de chocolate, que le dará un aspecto increíble a nuestro pastel.
Batimos a mano la mantequilla y el cacao en polvo con ayuda de unas varillas. A medio camino añadimos la vainilla y un par de cucharadas de leche hasta que todos los ingredientes se integren a la perfección. Si vas a usar café y canela ahora es el momento. No son imprescindibles, pero realzarán el sabor del chocolate.
Incorporamos el azúcar glas en varias tandas, removiendo todo el rato con las varillas. Si notamos que la masa está quedando demasiado espesa puedes echar una o dos cucharadas de leche más. El objetivo es que quede una crema muy suave.
Ya hemos acabado el frosting de chocolate, aunque hay que meterlo en la nevera durante al menos media hora para que repose y consiga una textura insuperable.
Desmoldamos el bizcocho con cuidado de no romperlo. A continuación lo bañamos con el frosting. Puedes usar una espátula para que la superficie quede totalmente lisa o bien una manga pastelera, como prefieras. Se recomienda poner el pastel encima de una rejilla con una bandeja debajo, de esta forma no se derramará nada.
Ya está lista nuestra Tarta de cumpleaños con chocolate, solo queda ponerla en una bandeja para su presentación y rematar con unas velas. ¡A disfrutar!

Con las cantidades que hemos propuesto salen aproximadamente 6 raciones de tarta. Si quieres más cantidad simplemente dobla los ingredientes. En este caso, también hará falta incrementar un poco los tiempos de cocción del bizcocho. Si no vas a consumir la tarta en el momento la puedes guardar sin problemas en la nevera. Esto es de gran ayuda, ya que podemos hacer la preparación un día o dos antes de la fiesta.

El secreto de un bizcocho esponjoso está en batir correctamente la masa, sobre todo los huevos, ya que de lo contrario se quedará apelmazado. Es indispensable mezclar durante diez minutos con una batidora de varillas o hacerlo a mano, hasta que los huevos y el azúcar doblen o tripliquen su volumen inicial y adquieran un tono blanquecino.

En cuanto a la cocción, hay que cocinar poco a poco, por lo que nunca se deben superar los 180 grados de potencia. De esta forma la masa se horneará de manera homogénea y mantendrá intacta su estructura, siendo más complicado que se desmorone. Se recomienda colocar el molde sobre una rejilla a media altura, para que el calor se distribuya uniformemente y no reseque la base.